viernes, 26 de mayo de 2017

Recogiendo cerezas en familia

Por suerte, los cerezos del pueblo maduran en diferente momento. Este año hemos estado en la primera parte de la recogida, que es cuando maduran las picotas. Y aunque la recogida fue un poco rápida, dados los compromisos deportivos adquiridos por los padres, no ha estado nada mal.

Lo mejor es que se han juntado todos los primos, al menos todos los que por el momento se pueden subir a una escalera sin mucho peligro. Todos se afanaban por llenar pronto sus cestas. 

Algunas estaban tan maduras que caían directamente al suelo al recoger otras. Pero las que se caen también se aprovechan, a no ser que las pise alguien, que con tanta gente era lo normal.

Me encantó ver a todas las generaciones juntas en la misma tarea. Bueno, no todas, a la mayor de todas nos la dejamos con su otra tarea favorita: haciendo punto. Si llega a venir nos da cien vueltas a todos, menuda es la abuelita.



No hay comentarios:

Publicar un comentario