Como regalo de bautizo para el primo le hemos hecho una tarta de pañales. En lugar de hacer un único regalo, hemos puesto pequeñas cosas que le servirán dentro de muy poco.
La mayor parte son cosas que le van a servir para cuando empiece a comer sólido: un cuenco, un plato llano, una cuchara, un babero de plástico y un vasito con asas.
También le hemos puesto una bolsa con muñecos de goma para la bañera y unos calcetines. Ah, y la inicial de su nombre, que les gustó mucho a sus primos.
Lo más caro de todo, sin contar los pañales, que ya no me acordaba de lo que valían, ha sido el marco de plata que corona la tarta.
La tarjeta que va en el marco también la he hecho yo y recuerda la fecha de nacimiento y el peso y las medidas con que nació.
La tarta de pañales es muy fácil de hacer. Se empieza con una bandeja redonda, en este caso de cartón, y el tubo de cartón del papel de cocina, que se coloca verticalmente pegado con cinta adhesiva. Y a enrollar pañales, que me he dado cuenta que se les da muy bien. Los pañales los hemos atado individualmente con gomitas de las de hacer pulseras.
Luego se van colocando los rollitos de pañal en la tarta, piso a piso, atando bien cada piso para que no se desparrame. Para atar los pañales de un piso, hemos utilizado cinta similar a la de raso que hemos comprado en una mercería, queda mucho más bonita.
En total hemos gastado un paquete entero de 60 pañales, para una tarta de tres pisos. Y este ha sido el resultado:
Esperamos que les haya gustado.
Pues sí, me ha encantado. Una chulada! A mí me regalaron una muy, muy parecida....
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