lunes, 29 de diciembre de 2014

Haciendo puzzles

¿Alguien puede creerse que un niño de cinco años, que no para quieto, pueda pasarse una hora haciendo puzzles y cuando los adultos se han aburrido ya, él quiera seguir? Increíble, pero cierto. Creo que le viene de herencia, ciertamente no por mi parte.

De pequeña no me gustaban los puzzles. ¿Por qué se ha de suponer que a una niña que saca muy buenas notas en clase, le gustan los puzzles? Supongo que eso pensaban de mí. Recuerdo que los Reyes Magos me trajeron una vez un puzzle. No recuerdo qué edad tenía. Realmente era un caja con dos puzzles distintos: un tigre y un oso polar. Confieso que nunca los hice. La única vez aque he visto esos puzzles hechos, tenía ya veintitantos, y no fueron hechos por mí, claro. Seguro que la caja sigue estando perdida por algún armario.

El caso es que Papa Noel ha venido con nuevos puzzles para hacer. Y son de esos puzzles que son chulos para enmarcar, suponiendo que tuviéramos sitio para colgarlos, claro. Así que ahora tenemos varios puzzles en distintas fases de realización. El más grande se saca y se guarda facilmente, utilizando un rollo de cartón y un mantel de fieltro. Otro de 500 piezas está encima de la mesa del salón, menos mal que no la utilizamos habitualmente. Y los de menos de 200 se hacen y se vuelven a guardar deshechos otra vez. El sitio favorito para hacer estos últimos es directametne el suelo.

En fín, que se puede pasar un rato con los niños de esta manera, desarrollando la capacidad de concentración y la paciencia, de los grandes y de los pequeños.

jueves, 25 de diciembre de 2014

Celebrando la Navidad

Como cada año, pasamos la Nochebuena en familia, alternando las casas de los abuelos. Este año no nos ha tocado viajar en Nochebuena y lo haremos para Nochevieja.

Aquí hay una tradición, sospecho que no muy antigua, en la que los bares ponen barras en la calle y sirven migas con las cañas. Esto lo hacen al mediodía de los días 24 y 31. Y, por lo tanto, hay muchísima gente en la calle, algunos imagino que habrán empalmado las cañas del medio día con la cena de Nochebuena. Lo malo de la fecha es que en la calle se pasa mucho frío.



Sin más, con la tarjeta que hemos hecho para una de las profes, os deseamos Feliz Navidad.

lunes, 22 de diciembre de 2014

Corriendo a todas partes

Como cada año, desde hace unos pocos, vamos a la carrera que se celebra en Aranjuez en esta época.

Es una de las carreras mejor organizadas que he visto, claro que, tampoco he visto tantas. Y el ambientazo es increíble. Lo mejor de todo es que, aunque la inscripción para adultos es algo cara, la inscripción para los niños es gratuita. Una manera estupenda de fomentar el deporte infantil.

Lo malo es que es en domingo y aunque nos pilla a poco más de media hora, hay que madrugar. 

Cuando vas a una carrera es buena idea salir con tiempo de sobra, no vaya a ser que se olvide algo importante, pongamos por ejemplo el dorsal, y haya que volver otra vez.

Este año, los dos pequeños han corrido en la misma categoría, así que ha sido un poco más facil organizarnos para dejarlos en la salida y recogerlos en la meta. Esto parece que no es importante, pero es que han corrido más de 100 niños y niñas nacidos entre los años 2007 a 2009. Tantos había que, aunque la organización tenía previsto que corrieran todos juntos, han tenido que separar a niños y a niñas. Y a pesar de algún que otro empujón y alguna que otra caída, se lo han pasado fenomenal en la carrera y han acabado muy contentos.

Así que todo ha ido genial este año, el tiempo acompañaba bastante y se han mejorado las marcas. Hasta yo la he mejorado, he esperado en la meta menos tiempo que otras veces. ;) A ver si algún año me animo a correrla.

viernes, 19 de diciembre de 2014

Escribimos las postales de Navidad

Estos días hemos estado haciendo las postales de Navidad para la familia y amigos. Este año, alguna de ellas cruzará el charco hasta el buzón de los primos que están lejos pero que, por suerte, veremos dentro de unos días.

Como tenemos una colección bastante grande de cintas, pegatinas, cartulinas, etc, pues no hemos tenido que comprar nada. Y con algo de imaginación y mucho de inspiración en internet hemos hecho estas tarjetas.

Aunque con algún que otro problemilla por eso de: ¡uff, no me caben todas las letras!, o , ¡uff, se ha emborronado todo!, al final creo que han quedado muy chulas.

Atentos al buzón porque igual hay una carta para vosotros.

También hemos aprovechado para enviar las cartas a los Reyes Magos, no sea que luego con las prisas no lleguen a tiempo.

Eso sí, hemos puesto claramente el remitente de las cartas de los reyes, no vaya a ser que los regalos vayan para otros niños que se llamen igual. Estas cosas nunca se saben y es mejor asegurarse. ;)

lunes, 15 de diciembre de 2014

Viendo las luces

Este fin de semana hemos estado viendo las luces de Navidad. Era una de las sorpresas que salieron en el Calendario de Adviento.

Como solemos hacer, hemos ido en autobús, a pesar de que estaba lloviendo. Y como somos muy valientes nos hemos ido sin paraguas ni nada, pensando que no llovería tanto. Pues sí, llovía bastante, tanto que hemos tenido que ir a un chino a comprar unos paraguas. Para estas cosas vienen bien estas tiendas, aunque afeen un poco el casco histórico de una ciudad.

Alguien recordó que el año pasado había una pista de patinaje sobre hielo en la plaza del Ayuntamiento y allí que hemos ido a ver. Y sí, la pista de patinaje estaba, pero esta vez sólo hemos mirado, teníamos otros planes. Pero ahí ha quedado la promesa de volver otro día a patinar. Yo no he patinado nunca sobre hielo, y como se me dé igual que patinar con patines en línea, el espectáculo puede ser lamentable.

El paseo por el casco histórico ha sido más agradable que otras veces, las luces le daban un ambiente más alegre. Esta vez no había tantos turistas como de costumbre, tal vez un poco espantados por la lluvia.

Y cómo no, hemos hecho la parada obligatoria en la tienda de crepes, que en defintiva creo que era a eso a lo que querían subir, las luces era una excusa. ;)

viernes, 12 de diciembre de 2014

Odiando se escribe sin hache

Después de haber dicho varias veces a un niño de 5 años que se vista podemos llegar a mantener la siguiente conversación:

-Haz el favor de ponerte ya los calcetines.
-¡Noooooooo!¡Te odio!
-¿Qué has dicho?
-Que te odio.
-¿Pero tú sabes lo que significa odiar?
-No tengo ni idea, pero me gusta decirlo.

Ah, pues en inglés sí que se escribe con hache.

lunes, 8 de diciembre de 2014

Corona navideña

Este año hemos elaborado una nueva corona para poner en la puerta. Lo mejor es que no hemos gastado nada de dinero ya que teníamos todos los materiales. La idea era utilizar un montón de caramelos que teníamos en un bote ocupando espacio y que recogimos de cabalgatas de años anteriores.

Materiales empleados:
  • Un cartón más bien gordo
  • Un monton de caramelos de distintos colores
  • Dos capsulas de café
  • Dos botones rojos
  • Hilo rojo
  • Cinta navideña
  • Pistola de silicona caliente
En primer lugar hemos cortado el cartón en forma de círculo de un tamaño no muy grande. 

Después hemos ido seleccionando los caramelos que más nos han gustado y que no estuviesen demasiado pegajosos, ya que llevan con nosotros bastante tiempo. Y los hemos elegido, no por su sabor, claro, sino por su color.

Entonces nos hemos puesto a pegarlos con la pistola de silicona formando círculos de diferentes colores. 

Por último, para que quede más navideño, hemos hecho unas campanitas con las cápsulas de café y les hemos colgado dentro unos botones rojos. Y hemos unido las campanitas mediante un lazo rojo con motivos navideños.

¿Quedará algún caramelo después de las fiestas?

viernes, 5 de diciembre de 2014

Árbol navideño

Ya hace unos días que tenemos puesto el árbol de Navidad. Cada año llega antes, no sé si por las campañas publicitarias o porque realmente lo estamos deseando. Pero, ¡qué le vamos a hacer, nos encanta!
Poner el árbol de Navidad tiene su complejidad. Menos mal que por lo menos no es muy grande, ya que no tenemos mucho espacio. Pero cada uno tiene su idea de cómo se debe adornar un árbol de Navidad. Puede ser con todos los adornos en el mismo lado (mira, mamá, !qué chulo queda así!), que está a punto de volcarse el árbol. O con todas las cintas arrastrando por el suelo. O incluso colgando bocabajo un muñeco de nieve que estaba por ahí.

Bueno, lo importante es que tenemos árbol y ya podemos poner los zapatos para que los Reyes Magos nos pongan los regalos. Esto si nos hemos portado bien, claro. Que ellos lo saben todo. 

Además, como queríamos hacer algún adorno nuevo para este año, hemos hecho un arbolito decorativo. Este adorno no va colgado en el árbol de Navidad, pero puede resultar muy chulo encima de alguna mesa.

Pues para el arbolito hemos utilizado:
  • un cono de poliespan
  • lana de color verde
  • pegamento en barra o cola blanca
  • pompones de los pequeñitos
  • una estrella que andaba por allí
Es tan fácil hacerlo como dar pegamento sobre todo el cono e ir enrollando la lana, intentando no dejar huecos blancos. Vamos, un juego de niños. Después se le da pegamento a los pompones y se van colocando sobre la lana verde. Esto ya, según nos guste que esté de recargado. Por último pegamos la estrella.

Otra opción sería utilizar, en lugar de pompones, botones pequeñitos de colores.

Y ahora una adivinanza de una niña de siete años: ¿Qué sería un árbol de Navidad sin sus adornos navideños? Pues un árbol normal y corriente.


lunes, 1 de diciembre de 2014

La bisabuela cumple 90 años

Mi abuela, que es bisabuela de cinco bisnietos, ha cumplido 90 años. Y menuda suerte es poder celebrar algo así. Últimamente ha estado un poco pachucha, pero poco a poco se va recuperando. Aunque somos concientes de que no va a estar ahí siempre, por mucho que nos gustase, todavía podemos disfutar plenamente de estar con ella, ya que, aunque en ocasiones te repite las mismas cosas varias veces, tiene una memoria que ya la quisiera para mí. Por no hablar de la vista, siempre he dicho que mi abuela ve tan bien que ve hasta lo que no está.

Por desgracia, no ha tenido una vida fácil. Cuando estalló la guerra civil no había cumplido aún los 12 años y aunque en su familia nunca les faltó de comer, las circunstancias eran muy difíciles para cualquier familia en aquella época, sobretodo en una familia tan numerosa como la suya. 

Tuvo que ver cosas como que un hermano, que no había cumplido los 17 años, fuera llamado para ir a la guerra. Me encanta escuchar cómo cuenta las historias de la de aquella época, los motivos de por qué pasaron las cosas que pasaron, pero además dando pelos y señales, se acuerda de todos los nombres.

Después tampoco ha tenido una vida mucho más fácil. Tuvo que trabajar muy duramente, junto con mi abuelo, para sacar a sus tres hijos adelante. Pocas veces la he visto sin hacer nada, si no tenía algo que hacer, se lo inventaba. Aún hoy en día, no para de hacer punto y ya creo que ha hecho una manta para cada miembro de la familia.

Por ser la mayor, creo que he sido la nieta que más ha podido disfutar de ella. Recuerdo perfectamente los veranos cuando me iba con ella por las tardes a regar el huerto. A veces no me apetecía ir y prefería seguir jugando, pero quizás precisamente por ser la mayor, sentía como la responsabilidad de ir a ayudarle. Y la verdad es que me lo pasaba muy bien con ella. A mí, a pesar de ser de pueblo y haber ido al campo millones de veces, me dan pánico los bichos, sobretodo los gusanos y las arañas. Pues allí me podíais ver, gritando y corriendo como una loca cuando veía alguno de estos bichos, y mi abuela la pobre sola recogiendo la cosecha. Recuerdo que siempre se echaba el trabajo más duro encima, dejándo el más fácil para los demás. Si había dos cestas, ella siempre cogía la que más pesaba. Así que siempre había que decirle: abuela, déjala, que yo cojo esa. Ella contestaba que no, que pesaba mucho para mí.

Tengo miles de anécdotas con ella, como cuando era muy pequeña, debía tener como unos 7 años, e ibamos a recoger la cosecha de melones con un burro a varios kilómetros del pueblo y en lo alto de un cerro. Recuerdo que íbamos mi abuela, su prima, yo y el burro. Al burro le pusieron un artilugio que se llamaba serón (resulta que esta palabra está en el diccionario), que es donde metían los melones. Para que yo no me cansara, me sentaban a horcajadas encima del burro. Pues según íbamos andando, la carga se iba desestabilizando y me iba cayendo para un lado. Cuando entre la dos volvían a colocar todo, resulta que me caía para el otro. Y de este modo conseguimos llegar al final al pueblo.

O cuando nos ofrecía polvorones en pleno mes de agosto. Me fascinaban los colores tan brillantes de los papeles de celofán que los envolvían. Y para que nos pasaron mejor los polvorones con el calor, nos ofrecía cocacola del tiempo, eso sí, caducada desde hacía 5 años. Os aseguro que el sabor no es exactamente el mismo pero no nos pasó nada.

A pesar de mi carácter, protestón por naturaleza, no recuerdo a mi abuela enfadada conmigo nunca. Al revés, siempre he sentido que me quiere mucho y que está orgullosa de mí. Sólo puedo decir que tener una abuela como esta es una auténcia pasada.

En los últimos años, aún cuando mi abuelo vivía (se murió cuando mi hijo pequeño tenía 2 meses), ha invitado a toda la familia por el día de su cumpleaños. A sus bisnietos les encanta el sitio donde nos suele invitar porque tenemos un salón sólo para la familia y casi pueden hacer lo que quieren.Y salvo alguna visita a urgencias con alguno de los bisnietos, lo hemos pasado muy bien. Los nietos, que somos 10 en total sin contar los nietos políticos, aprovechamos ese día para hacerle un regalo especial y demostrarle lo que la queremos. Así que al final le hacemos llorar y terminamos todos llorando también. Esperamos poder repetir este año y muchos otros.

Espero poder celebrar muchos más porque, como dice mi hija, ¿que pasaría si la bisabuela llegara a los 100 años?. Pues que tendríamos muchos más motivos para celebrarlo.

viernes, 28 de noviembre de 2014

Galletas de leche condensada

Hemos pasado muchas tardes haciendo galletas. Y varias veces con amigos del cole, donde casi había más manos que masa. Pero siempre disfrutando de cocinar nuestras propias galletas. Esta receta es facilísima para hacer con niños.

Aquí van los ingredientes son:
  • 100 gr. de mantequilla
  • 100 gr. de leche condensada
  • 140 gr. de harina
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla (la cucharadita de moca, que son más pequeñas)
  • una pizca de sal
  • chocolate negro o blanco para fundir
  • virutas de colores, confetti, etc.
Y esta es la elaboración:
  • Echamos en un bol la mantequilla, el extracto de vainilla y la sal.
  • Añadirmos la leche condensada en hilo y batimos toda la mezcla.
  • Añadimos la harina tamizada (se puede utilizar un colador) y amasamos bien con las manos.
  • Hacemos bolas con las manos, que no sean muy grandes y las vamos poniendo en una bandeja de horno con papel de hornear. Las aplastamos un poco para darles forma de galleta.
  • Con el horno precalentado a 180 ºC, horneamos de 12 a 15 minutos.
  • Mientras que enfrían un poco, preparamos el chocolate para decorar. Lo fundimos al baño maría o en el microondas y lo ponemos en una manga pastelera. Vamos poniendo un poco por encima de las galletas.
  • Echamos las virutas de colores por encima para que se peguen.
Espero que os guste y paséis una tarde divertida haciéndolas. En nuestra cocina ha llegado a haber cinco niños poniendo virutas sobre las galletas y sin desperdiciar ni una miga.

lunes, 24 de noviembre de 2014

Calendario de adviento

Este año nos hemos animado a hacer un Calendario de Adviento. Así vamos descontando los días que nos faltan hasta Navidad. 

Aunque consta de 24 casillas, desde el 1 al 24 de diciembre, creo que en el próximo tendremos que hacer casillas desde el 15 de noviembre, que es cuando han empezado a preguntar que cuánto queda para Navidad.

En principio tenía previsto otro formato, pero por falta de material (lo estamos recopilando de toda la familia) lo dejaremos para otro año. 

Este calendario es muy sencillo de hacer, en una tarde lo teníamos terminado. Casi todos los materiales los teníamos en casa, sólo nos hizo falta comprar una lámina grande de goma eva.

Esta es la lista de materiales que hemos utilizado para elaborar este calendario:

-Una plancha de goma eva.
-24 sobres pequeños
-24 pinzas pequeñas
-una cuerda para colgar los sobres
-cinta washi tape para decorar los sobres
-pegatinas de números
-pegatinas brillantes
-cartulina marrón
-pompones pequeños

Ahora el problema va a ser qué metemos dentro de los sobres. En principio será una nota donde ponga el verdadero regalo. Pero no quiero poner muchas cosas que impliquen gastar dinero, así que será algo de estilo: ir a ver las luces de Navidad, visitar el Belén viviente, elegir la cena, ver una peli con palomitas, y así, hasta 24. Ahora pienso que en menudo lío me he metido.

Pero lo importante es que así pasamos otra tarde disfrutando juntos.

viernes, 21 de noviembre de 2014

Arqueólogos por un rato

El fin de semana pasado hicimos de Tadeo Jones, es decir, de arqueólogos aficionados. Aunque sólo fue por un rato. 

En el cole nos hablaron de esta actividad para padres e hijos que se ha estado celebrando durante estos últimos dos meses en el Circo Romano de Toledo. Y la verdad es que ha estado muy interesante.

Lo mejor ha sido que, los padres por un lado y  los hijos por otro, hemos desarrollados distintas actividades. A los padres se nos dio un mapa del Circo Romano y teníamos que buscar varias cosas utilizando este mapa y los paneles informativos: una huella de romano, una lucerna (lampara romana) y un arco romano. Pues lo bueno es que tardamos más del doble del tiempo que nos habían dado en encontrar todas las  pistas. En fin, que los padres no teníamos precio como exploradores.

Por otro lado, los niños estuvieron excavando para encontrar objetos romanos, pero como recalcaron después "no fue en la tierra, mamá, sino en unas cajitas". A ellos se las van a dar con queso.

Y hasta hicimos una actividad práctica: prender una lucerna con aceite y una mecha.

Al final realizamos una visita guiada por el circo, que nos sirvió para entender un poco mejor el patrimonio que tenemos y del que, por desgracia, no somos conscientes.

Aunque pueda parecer lo contrario, nos dijeron que este circo está muy bien conservado y es uno de los más grandes de la Hispania. Últimamente se han hecho varias actuaciones en él para evitar, entre otras cosas, que se utilizara como aparcamiento. Aunque, desgraciadamente, se sigue utilizando como zona de botellón, como pudimos comprobar el domingo por la mañana.

Les gustó tanto que incluso ya de vuelta nos decían que cuándo podíamos volver otra vez.

lunes, 17 de noviembre de 2014

Teleférico de Madrid

Una excursión muy divertida para ir con niños es hacer un viaje en el teleférico de Madrid. El precio del viaje no es que sea muy barato, para los 11 minutos que dura el trayecto, pero es muy entretenido el hecho de ir viendo Madrid desde los aires. Y si tienes miedo a las alturas, no te preocupes, a mí me dan pánico y no sentí miedo en ningún momento.

Puedes comprar la entrada junto con la del Parque de Atracciones o con la del Zoo. No sé si en este caso hacen descuento. Incluso puedes comprar la entrada con la comida.
Para llegar al teleférico en metro hay que bajarse en la estación de Argüelles y después seguir cuesta abajo por la calle Marqueses de Urguijo hasta la estación del teleférico de Rosales, es un paseo corto. La otra estación es la que está en la casa de campo.
Esta excursión la hicimos por la tarde, así que cuando llegamos a la estación destino tomamos un café en el restaurante de la casa de campo, disfrutando de unas espectaculares vistas de Madrid. Había muchos turistas y familias con niños, ya que era un día sin colegio.
El restaurante también tiene un parque de bolas, que hay que pagar aparte, y que puede ser una opción muy interesante con niños pequeños si se quiere comer allí.
Pero la parte que más nos gustó, aparte de las espectaculares vistas, fue que justo fuera hay un parque con muchísimos juegos para los niños y bastantes bancos para que los padres podamos vigilar tranquilamente sentados. Esto último un poco difícil ya que nos pasamos casi todo el rato ayudando a trepar a las fieras por los columpios. También había unas cuantas mesas por si te quieres llevar la comida o la merienda. Quizás la próxima vez probemos esta opción.

Ya de vuelta, justo al lado de la estación de Rosales y dándole nombre, está La Rosaleda o Jardín de Rosales. En este jardín existen muchísimas variedades de rosales de todo el mundo y anualmente se hace un concurso para elegir la mejor rosa. La pena fue que ya estaba oscureciendo y no lo pudimos ver en todo su esplendor. Sin duda es un sitio muy bonito para pasear un rato disfrutando de las rosas. Ah, y la entrada es gratuita.

La verdad es que la tarde nos cundió mucho, porque seguimos caminando por el Parque Oeste de Madrid y llegamos al Templo de Debod. El Templo fue regalado por Egipto a España en 1968 como agradecimiento por la ayuda española en la conservación de los templos de Nubia, que iban a desaparecer por la construcción de la presa de Asuán. Tiene nada menos que 2200 años. La entrada también es gratuita, aunque no pudimos entrar porque ya era tarde. Había muchísimo ambiente e incluso disfrutamos como espectadores de una sesión fotográfica con fondo el templo.

También presenciamos como una pareja de grafiteros pintaban las tildes que faltaban en la inscripción de una estatua que había allí en el parque, creo que de una monja. Al parecer estaban más interesados en la ortografía que en comportarse cívicamente y respetar el patrimonio. Y no eran una jóvenes con sprays sino sexgenarios con rotulador permanente.

Pues esto es todo lo que se puede hacer en una tarde en familia en Madrid, lo de la noche ya lo hablaremos otro día.

viernes, 14 de noviembre de 2014

El libro de las emociones

Esta es nuestra última adquisición, un diccionario de emociones o "Emocionario", que así es el título del libro. Viene indicado para niños de entre 5 y 8 años, pero diría que nos viene bien a todos para refrescar los conceptos y para ver escrito esto que a veces sentimos.

Emocionario
En el libro vienen explicados, de una manera sencilla, una colección de 42 emociones o sentimientos humanos.

Los niños podrán darse cuenta de lo que les está pasando, de los sentimientos que tienen, y les vendrá genial para poder afrontar con normalidad esos sentimientos.

Lo ideal es compartir la lectura con ellos. Pasar un ratito juntos intercambiando impresiones y, además, seguro que les surgirán un millón de preguntas que hacernos.

Además, vienen unas ilustraciones super bonitas.

Vamos, una chulada de libro con un idea genial, explicar las emociones.

lunes, 10 de noviembre de 2014

¿Como mamá o como papá?

Como cada temporada, he recibido en el buzón una publicidad de una tienda de ropa que vende por internet. La ropa es para niños desde 0 a 14 años, que la verdad es que me encanta y es de muy buena calidad. De hecho compro casi todas las temporadas desde que son bebés.

En este caso se trata de que le hacen al niño o niña un regalo añadido al pedido que realices.
Lo que me llama poderosamente la atención es que todavía se usen los estereotipos "como mamá o como papá", supuestamente diferenciando las cosas que puede hacer mamá (llevar un bolso rosa muy bonito con móvil, llaves, maquillaje, etc) y las que puede hacer papá (llevar un bolso con sus herramientas de bricolaje). Aunque no conozco ningún padre que se maquille (esto es algo cultural), sí que utilizan otros productos de belleza, pero ¿acaso las mamás no hacen bricolaje o no utilizan herramientas?¿Realmente era necesaria esa diferenciación de género?

Por si la cosa no está clara, es decir, por si no está claro que la niña tiene que ser como mamá y coger el bolso rosa y el niño tiene que ser como papá y coger el bolso gris, en la parte de atrás del folleto, aparece una niña jugando con el bolso rosa (supuestamente de mamá) y un niño jugando con el bolso gris (supuestamente de papá). 

¿Estamos seguros de qué cogerían nuestros hijos? Pues haciendo un sondeo rápido por casa me he dado cuenta de que tanto mi hija como mi hijo cogerían el bolso gris. Espero que no sea porque no me ven maquillada muy frecuentemente.;)

Esto también me recuerda a unos grandes almacenes españoles que hace unos meses tuvieron que retirar del mercado unos bodies para bebés en los que se podían leer estos mensajes: "inteligente como papá","bonita como mamá". Y no, las versiones "inteligente como mamá" y "bonito como papá" no estaban disponibles.

En fin, que aún queda mucho trabajo por la igualdad. ¿Lo estaremos haciendo bien los padres y madres de hoy en día? El resultado lo veremos en unos años, claro.

Y por cierto, tras el sondeo que he realizado, mis hijos han ido corriendo a buscar la bolsa con herramientas de bricolaje de juguete que tienen. Se vé que, de repente, les ha apetecido mucho jugar con ellas.

viernes, 7 de noviembre de 2014

Dimitir no es un nombre ruso

Conversar con un niño de de 5 años puede llevarte a sitios que no esperas. Atención, los personajes mencionados podrían ser reales:



-Mamá, ¿qué es dimitir?

-Mmm, a ver si te lo puedo explicar para que lo entiendas. Pues es cuando estás haciendo algo y te vas.

-Ah, pues yo he dimitido de mi amigo Juan y me he ido a jugar con mis amigos Jorge y Pedro.

lunes, 3 de noviembre de 2014

Planetario de Madrid

Aprovechando el día sin cole del 31 de octubre nos fuimos a Madrid de excursión. Ya hemos ido muchas veces y en esta ocasión tocaba visita al Planetario, que nunca habíamos estado.
Nosotros por Madrid generalmente nos movemos en metro. Consideramos que es la manera más rápida y cómoda, sobretodo ahora que no llevamos carro.
Exterior del planetario
El Planetario, entre semana por las mañanas, sólo abre para excursiones de colegios. Pero como este día no había cole, fuimos sin problemas por la mañana.
Cuando llamamos nos dijeron que la mejor para de metro era la de Méndez Alvaro, que además es una estación de cercanias renfe y la mayor estación de autobuses de  Madrid, pero según íbamos llegando nos pareció mejor idea bajar en la estación Arganzuela-Planetario. Más o menos están igual de cerca, pero desde ésta última es subida. Una rampita, según el vigilante jurado de la estación, que resultó ser de unos 100 metros. Lo peor es que hasta llegar a la rampita, hay que atravesar unas vías de tren que no se usan y van hasta el Museo del Ferrocarril. Estas vías no son aptas para "despistados" que pueden meter los pies entre los raíles. Sí, lo habéis adivinado, alguien metió el pie.
Experimetando
A lo que vamos, que el Planetario es un sitio dónde los niños (y los adultos por qué no decirlo) pueden aprender muchas cosas sobre el sistema solar y el universo en general. Hay bastantes experimentos que puedes hacer con ellos, aunque los que no saben leer aún, se pueden aburrir un poco. También hay actualmente un par de proyecciones  que me resultaron muy interesantes: una sobre el sistema planetario y otra sobre las auroras boreales.
El satélite dormilón
En la cúpula del planetario también hay distintas proyecciones para niños, según la edad de los mismos. Estuvimos viendo "El satélite dormilón", que era para niños de hasta 7 años y dura unos 40 minutos. Este satélite resultó llamarse LÓPEZ (Laboratorio Óptico del Proyecto Espacial Zoom) y tener un amigo llamado PÉREZ (Primer Explorador Remoto Lanzado al Zodiaco). Menuda imaginación tienen los del Planetario. Me pareció que estaba explicado de una manera en que los niños de esa edad pueden entenderlo fácilmente.
Una vez en el exterior, se puede acceder a otra exposición sobre el planeta rojo (Marte, para los amigos).
De todo lo que vimos, me quedo con una frase de Albert Einstein, quien dijo que "La imaginación es más importante que el conocimiento".

¡Pues a imaginar se ha dicho!

viernes, 31 de octubre de 2014

Víspera de Todos los Santos

Hoy es la víspera de Todos los Santos, a pesar de que cada vez nos invade más la tradición anglosajona de "Halloween" y de la cual, tengo que confesar, cada vez son más fan.

Pero los que creáis que esta tradición no es de España, estáis muy equivocados. No tan terrorífica como la original anglosajona, es decir, sin vampiros, calaveras, zombies y sangre a raudales, pero en mi familia la hemos celebrado toda la vida.
Desde que éramos pequeños hemos vaciado calabazas, hecho ojos y bocas terroríficas y les hemos metido una vela dentro para que queden iluminadas en la oscuridad. La idea era colocarlas en sitios estratégicos del pueblo para dar mucho miedo. Esto último no siempre daba mucho resultado, pero la pasábamos muy bien.


Ahora que tengo hijos, intento seguir con ellos la tradición de las calabazas pero añadiéndole cosas de la tradición anglosajona. Para ello, los adultos de la familia nos disfrazamos y les hacemos un espectáculo digno de la casa del terror, por lo malo, digo, no porque dé miedo. Las caracterizaciones a veces incluso dan risa. Pero la cuestión es provocar en ellos esa mezcla entre "¡qué valiente soy porque soy mayor!" y "¡qué miedo tengo quiero irme con mis padres!".
Pues hoy, que es la víspera de todos los santos, vamos a echar de menos a la tía que está al otro lado del charco (porque con ella siempre celebramos Halloween y nos gusta mucho). Así que no me tocará ponerme el disfraz de fantasma para asustarles y tampoco se preguntará nadie porqué el fantasma lleva las zapatillas de su madre.

Centrándonos ya en lo que hemos estado haciendo esta semana, para sumergirnos en el ambiente de Halloween, hemos elaborado unas manualidades relacionadas con esa tradición. Todos los materiales los teníamos en casa, y además ha resultado facilísima la elaboración (salvo un intento fallido de pintar las bolas de poliespan con pintura en spray de los chinos). Y así tenemos la casa ahora, llena de murciélagos, fantasmas y arañas (aunque algunas algunas ya estaban de antes).


Disfrutad mucho de la fiesta y ¡Happy Halloween!

miércoles, 29 de octubre de 2014

Presentación

Soy una madre de familia a la que sus hijos le preguntan frecuentemente: ¿Está tarde, qué hacemos?. Entre semana tengo fácil la respuesta: "la tarea". Pero hay otros momentos en los que puede surgir otras actividades más lúdico-festivas y a ser posible que no dejen vacía nuestra hucha.

Me encanta viajar, hacer excursiones, visitar museos y todo lo que implique "salir por ahí" con ellos ¡Quién fuera millonario para sólo tener que ocuparse de elegir el siguiente destino!

También me gusta tener conversaciones con ellos, especialmente cuando te dejan de piedra.

Y como esto no va a durar eternamente (más o menos hasta que cumplan los 26), me gusta la idea de poder recordar en un futuro, y sobretodo que ellos recuerden, las cosas que hemos ido haciendo juntos.

Pero no os creáis que sólo de actividades con hijos vive el hombre, que también puede haber hueco para las actividades en pareja, con amigos, con la madre o con la suegra. Aquí ya se abre un abanico de posibilidades.;)

¡Sed bienvenidos!